Ocho personas fueron capturadas en una operación realizada en el barrio Laureles. Trabajaban para "la Terraza" como oficina de cobro y fueron los encargados de hurtar más de $20.000 millones que tenía escondidos el Clan de Golfo en un apartamento de Medellín, producto del narcotráfico.
Ocho presuntos integrantes de la estructura criminal "la Terraza" fueron capturados en desarrollo de una operación en Laureles, comuna 11, y que estarían relacionados con cuatro homicidios sistemáticos en Medellín y Barranquilla en la disputa por territorios para actividades ilícitas en la capital antioqueña.
La escena, que compone todo el acervo que hay detrás de estas capturas, es como de película. De acuerdo con las autoridades, las personas ya en detención intramural harían parte de una oficina de cobros y homicidios en el occidente de Medellín y que están al servicio de la estructura de la cual funge como jefe delincuencial alias "Douglas", ya también en manos de las autoridades.
Uno de los homicidios se habría ejecutado por alias "Mono", presunto cabecilla de la banda delincuencial el pasado 6 de abril de 2018 en el barrio Conquistadores, de un hombre quien supuestamente estaba señalado de hurtar $20.000 millones al Clan del Golfo, producto de negocios ilegales como el narcotráfico, extorsiones, entre otros.
"Hay suficiente evidencia física, de acuerdo con lo que tenemos con fiscales especializados de Crimen organizado, que los vinculan con disputas criminales en Medellín y en el norte del país con el Clan del Golfo, por unos dineros producto del narcotráfico. Lo que sabemos es que estas personas, presuntamente, fueron contratadas para el hurto de esos dineros", dijo el general Jorge Luis Vargas Valencia, Director de la Dijín de la Policía Nacional.
De acuerdo con las autoridades, la organización de "la Terraza" hace parte de la llamada "Alianza de Estructuras Criminal", un ala disidente de "la Oficina" y que libra una disputa por territorios en diferentes zonas de la ciudad, que han sido dejados por organizaciones desarticuladas por las autoridades o por la guerra entre los mismos delincuentes.
En esa lucha, las autoridades dieron a conocer la relación que hay entre una facción del "Cuerpo Colegiado de la Oficina", que estaba bajo el mando de alias "Tom" con el Clan del Golfo, y de ahí que alias "Douglas" haya ido detrás del dinero que estaba escondido en un apartamento en Laureles y que fue hurtado en hechos ocurridos el 10 de octubre de 2017.
"No hay presencia estructural delincuencial armada o violenta, del Clan del Golfo en Medellín, como la que tiene en otras partes de la geografía nacional. Su presencia en esta ciudad obedece a una coordinación para el narcotráfico con parte de lo que se denomina 'la Oficina'. Una recolección de las evidencias materiales y que tenemos entre la Fiscalía, la Policía de Colombia y autoridades de Estados Unidos como DEA y FBI ha producido capturas de cabecillas de 'la Oficina' y miembros del Clan del Golfo", agregó el general Vargas Valencia.
Por su parte, Andrés Felipe Tobón Villada, secretario de Seguridad, explicó que esta es una de las tareas fuertes que está realizando la institucionalidad en Medellín para reducir la capacidad de operación, intimidación y terror que infunden las estructuras a la ciudadanía.
"Hoy no hay un orden claro en materia criminal. Hoy no hay una estructura clara en materia criminal producto de la persecución decidida en contra de 120 cabecillas y más de 2.600 integrantes que han sido llevados ante las autoridades. Falta todavía mucho, pero el camino está trazado y la persecución a las estructuras no va a retroceder un centímetro", aseguró el Secretario.
Las ocho personas capturadas en la operación denominada Laureles serán sindicadas por delitos relacionados con homicidio agravado, concierto para delinquir agravado, extorsión, tráfico, fabricación y porte de estupefacientes, tráfico, fabricación y porte de armas de fuego.
